Los recién nacidos requieren muchos cuidados especiales, uno de ellos está relacionado con el cordón umbilical. Ahora, este es sólo un muñón de lo que fue el cordón umbilical en su totalidad; su función era suministrar a tu bebé del oxígeno y nutrientes para crecer.
Al momento del parto se realiza un pinzamiento y un corte del cordón umbilical para separarlo de la placenta, dejando solo una pequeña parte que se secará y caerá dentro de los próximos 7 a 21 días. A continuación, te compartimos una serie de recomendaciones para cuidarlo en casa:
Puedes bañar a tu bebé usando una tina, pero los baños de esponja pueden ayudar a evitar el exceso de humedad en el muñón. En ambos casos opta por usar productos dermatológicamente probados, suaves y hechos especialmente para bebés.
Es muy importante que evites jalar el muñón, aunque parezca que está por caerse, permite que se desprenda por sí solo para favorecer su cicatrización. Al caer es posible que veas un tejido de aspecto amarillento, rosado o rojizo, llamado granuloma; consulta al pediatra si notas hinchazón, mal olor o que tu bebé siente dolor en la zona.
Recuerda evitar el uso de remedios caseros o recomendaciones no especializadas, pues éstos podrían influir negativamente en el proceso de curación y repercutir en la salud de tu bebé.
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